Mi vida no gira en torno a ti.
No soy la Tierra girando
alrededor del Sol
Apareciste de repente
después de meses sin saber de ti,
me recordaste a las ballenas,
tan majestuosas,
tan enormes,
con tantas cosas por decir
pero con un gran silencio
que guardar.
Resurgiste de las profundidades,
o quizás,
fuí yo
la que por fin alcanzé
la superf,
nadando,
casi ahogándome,
conseguí,
respirar,
y fue ahí donde
me encontre contigo.
Tu aleta me enunció
que ahí estabas tú,
asomando tu sonrisa
entre el agua,
y yo por,
un momento la acaricié
con la nostalgía
de saber,
que tarde o temprano
volverías a desaparecer.
Y así ha sido.
Te has vuelto a sumergir.
Y no sé cuándo volveré
a verte.
Seguramente recorrerás
los siete mares,
los millones de ríos,
y todos los océnaos
que tenemos en común
tú y yo,
en este planeta.
Seguramente,
pero,
como contigo
todo es impredecible.
Entonces,
sólo me queda esperar.
Que no esperarte.
Mi vida ya no gira
en torno a ti,
ni entorno a ti,
ni a nadie.
Citando a Irene X:
"No soy una cinta
donde puedes clavar
tu lápiz y rebobinar.
No puedes perforarme,
más allá de mí,
no puedes ver.
Mi sexo no es una cueva
donde puedes cobijar tu pluma
y olvidar la tinta.
Mi anatomía no es una libreta
que puedes llenar de púpuras
y verdes negros.
Mi ombligo no es el eje
sobre el que giras."
Yo seguiré nadando,
quiero que lo sepas,
y si alguna vez
volvemos a coincidir,
porque,
ya te digo yo que sucederá,
sólo te pido que me saludes,
que me salpiques
o que me cantes algo.
Sé que Alba Reche
ha sacado nueva canción,
me puedes hablar de ello,
o de cómo llevas las opos de policía,
o me puedes preguntar
si ir al gym me sigue pareciendo postureo.
Me puedes hablar de muchas cosas,
me puedes sumergir las veces que quieras,
y que nademos juntas durante
unos segundos,
o el tiempo que aguantemos mirándonos
fijamente a los ojos.
Puedes hacerlo,
pero,
recuerda una cosa:
yo flotaré,
y seguiré nadando.
Tú te sumergirás.
Porque,
aunque no lo creas.
Las dos somos mamíferos,
pero tú aguantas más tiempo
sin respirar
que yo.
Recuerda:
la apnea,
nunca fue lo mío.
Nos vemos en la superficie.
No soy la Tierra girando
alrededor del Sol
Apareciste de repente
después de meses sin saber de ti,
me recordaste a las ballenas,
tan majestuosas,
tan enormes,
con tantas cosas por decir
pero con un gran silencio
que guardar.
Resurgiste de las profundidades,
o quizás,
fuí yo
la que por fin alcanzé
la superf,
nadando,
casi ahogándome,
conseguí,
respirar,
y fue ahí donde
me encontre contigo.
Tu aleta me enunció
que ahí estabas tú,
asomando tu sonrisa
entre el agua,
y yo por,
un momento la acaricié
con la nostalgía
de saber,
que tarde o temprano
volverías a desaparecer.
Y así ha sido.
Te has vuelto a sumergir.
Y no sé cuándo volveré
a verte.
Seguramente recorrerás
los siete mares,
los millones de ríos,
y todos los océnaos
que tenemos en común
tú y yo,
en este planeta.
Seguramente,
pero,
como contigo
todo es impredecible.
Entonces,
sólo me queda esperar.
Que no esperarte.
Mi vida ya no gira
en torno a ti,
ni entorno a ti,
ni a nadie.
Citando a Irene X:
"No soy una cinta
donde puedes clavar
tu lápiz y rebobinar.
No puedes perforarme,
más allá de mí,
no puedes ver.
Mi sexo no es una cueva
donde puedes cobijar tu pluma
y olvidar la tinta.
Mi anatomía no es una libreta
que puedes llenar de púpuras
y verdes negros.
Mi ombligo no es el eje
sobre el que giras."
Yo seguiré nadando,
quiero que lo sepas,
y si alguna vez
volvemos a coincidir,
porque,
ya te digo yo que sucederá,
sólo te pido que me saludes,
que me salpiques
o que me cantes algo.
Sé que Alba Reche
ha sacado nueva canción,
me puedes hablar de ello,
o de cómo llevas las opos de policía,
o me puedes preguntar
si ir al gym me sigue pareciendo postureo.
Me puedes hablar de muchas cosas,
me puedes sumergir las veces que quieras,
y que nademos juntas durante
unos segundos,
o el tiempo que aguantemos mirándonos
fijamente a los ojos.
Puedes hacerlo,
pero,
recuerda una cosa:
yo flotaré,
y seguiré nadando.
Tú te sumergirás.
Porque,
aunque no lo creas.
Las dos somos mamíferos,
pero tú aguantas más tiempo
sin respirar
que yo.
Recuerda:
la apnea,
nunca fue lo mío.
Nos vemos en la superficie.
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