Me gustaría contarte que hoy ha nevado en Madrid,
que te hubiera podido escribir 5 mensajes preguntándote en cada uno cómo estás.
No te puedo escribir, tampoco quiero,
tú tampoco lo haces, y no sé qué es lo que más me duele,
mis ganas de escribirte y no poder hacerlo,
o que tú ni si quiera lo hagas.
Ha ido tu hermano a pasar unos días contigo a Tenerife,
sé que ahora me harás aún menos caso,
mañana compito en mi 1ª Duatlón distancia olímpica,
me gustaría que te acordases de esto, que es tan importante para mi,
me gustaría que hicieras tantas cosas que nunca haces,
que sé, que nunca harás.
A veces pienso lo muy doloroso que estar contigo así,
la distancia ya ha pasado a ser un daño colateral,
lo escucho de fondo,
pero ya no sale sangre de esta herida,
ya no supura,
ni me retuerzo del dolor en el suelo por tu ausencia,
podría hacer todo eso, retorcerme del dolor,
gritar en el suelo, patalear, pedirte tu atención.
Podría hacer todo eso, y mucho más,
pero lo más doloroso de todo esto,
lo más doloroso de estar contigo,
de toda esta situación,
es que tú no harías absolutamente nada,
te quedarías ahí inmóvil,
estática, completamente quieta,
contemplando mi muerte,
contemplando cómo me retuerzo del dolor,
cómo te grito,
cómo te suplico que me mires,
podría hacer todo esto, y mucho más,
podría hacer todo esto,
que tú no harías nada,
absolutamente nada.
A veces pienso que mi existencia para ti,
es una mera mota de polvo en el universo:
algo insignificante, sin importancia y una pérdida de tiempo.
Es muy frustrante que la persona de la que estás enamorada
pase de ti, le des igual, o simplemente te haga sentir así.
Es una sensación horrible, angustiosa,
y aún más desagradable no poder contarte nada de esto,
porque mi apego ansioso te absorbe el alma, me dijiste ayer hablando por tlf
mientras andaba por las calles con las manos congeladas
mientras sujetaba el tlf.
Sé que en el fondo tienes razón: que te pido mucho mucho más
de lo que me puedes dar, de lo que nadie me puede dar,
quizá nadie nunca llegue a dármelo, y es agotador estar con alguien como yo,
porque, siempre quiero más y más. Nunca nada es suficiente para mi.
Me siento como si me estuviera desintoxicando,
desintoxicándome de ti,
todos mis sentidos me hacen querer escribirte,
pero mi parte racional me dice que no lo haga,
que aguante, que seas tú la que, por una vez,
vayas detrás mío.
Qué asco, no me gusta,
siento como la ansiedad me empieza a comer,
me sube por la garganta, y noto cómo me cuesta respirar,
no quiero escribirte, no puedo hacerlo, aguanta.
Todo esto es una mierda,
ya lo sé,
pero lo haces muy bien, me digo.
Qué mierda no poder contarte nada de esto,
y tener que escribirlo en un blog
que nunca leerás, me queda ese consuelo,
nunca lo leerás,
porque si no lees ni los mensajes que te escribo,
no creo que nunca llegues hasta este blog,
pero por si acaso:
te quiero,
aunque no sé si eso ya importa,
si a ti te importa me refiero,
porque tú eres lo más importante para mí,
qué pena que no estemos en el mismo punto,
al menos esto es lo que pienso yo.
Te quiero bb, vuelve ya.
2/03/24
Comentarios
Publicar un comentario