Me acuesto a las tres de la madrugada,
son las seis,
y no consigo dormir,
la cama se me dispone inmensa,
pensando que tú,
nunca volverás a dormir,
ni mucho menos,
abrazarme en ella.
Mi madre se va a trabajar,
yo aún no he empezado a dormir,
y empalmo noche con día,
con la estúpida esperanza
de encontrarte por el camino,
resultado:
no sucede.
Y la angustia vuelve a la boca,
el dolor al pecho,
y el frío al cuerpo.
Cierro los ojos,
no,
tú ya no estás aquí,
y a cada segundo que pasa,
me doy cuenta:
dueles un poco más,
no sé cuánto voy a ser capaz
de aguantar.
Y lo peor de todo,
es que ésta es la primera noche:
la pesadilla ha comenzado.
5.junio.19
son las seis,
y no consigo dormir,
la cama se me dispone inmensa,
pensando que tú,
nunca volverás a dormir,
ni mucho menos,
abrazarme en ella.
Mi madre se va a trabajar,
yo aún no he empezado a dormir,
y empalmo noche con día,
con la estúpida esperanza
de encontrarte por el camino,
resultado:
no sucede.
Y la angustia vuelve a la boca,
el dolor al pecho,
y el frío al cuerpo.
Cierro los ojos,
no,
tú ya no estás aquí,
y a cada segundo que pasa,
me doy cuenta:
dueles un poco más,
no sé cuánto voy a ser capaz
de aguantar.
Y lo peor de todo,
es que ésta es la primera noche:
la pesadilla ha comenzado.
5.junio.19
Comentarios
Publicar un comentario